Entradas

Cuando el cielo dibuja olas.

IMG_20171121_065036_883 Esto va de una chica de interior que culpaba a su río por no ser el océano que siempre anhela; pero era el cielo el que dibujaba para ella olas de nubes, el que le regalaba el azul marino.
Apenas nada de lo que he buscado con ahínco me ha sido dado. Por contra, tantas cosas extraordinarias han venido a mí sin pedirlas que necesitaría décadas para contarlas. La vida siempre me encuentra en movimiento, y creo que es el truco de todo esto: que el alma circule en gerundio y con ojos abiertos. Amando. Riendo. Llorando. Intentando. Aprendiendo. Caminando. Sólo así el viaje te encuentra y se ve el cielo que dibuja para ti olas de nubes.

#actitud

IMG_20171128_063812_156 Me enamoré de este árbol decapitado, tan orgulloso de sí a pesar de su desastre, y le pedí matrimonio allí mismo, al lado del Ebro. Me dijo que no conocía matrimonios entre árboles y mujeres, que por qué él. Por tu #actitud, sonreí. Supe que una inundación sólo lo haría más hermoso, que incluso debajo del agua encontraría la manera de fabricar cristales de colores con el moho.
Estuvimos de acuerdo en que él querría a una arbolesa como yo, y que yo querría a un hombre tan árbol como él. Y por eso hoy le  dedico esta entrada:  a él y a todos los árboles que cada día encontráis la manera de fabricar cristales con el moho.

#espaciosquemiranalcielo

IMG_3507 Me gustan los espacios que abren sus puertas,  donde el muro deja que se cuele la luz.

Me gustan los templos, la playa que me guarda secretos, la biblioteca donde me escondo, las montañas, los museos, el sendero de mi río, el suelo de mi casa, el rincón donde escribo.

Ese lugar donde acudes cuando la vida te sacude. Donde te rindes y te perdonas. Donde eres terriblemente humano.

(Imagen de Felipe A. Muñoz Instagram @famc_books)

Mujeres que surfean la vida.

IMG-20171017-WA0002Basta de mapas o planes,  concluyeron dos amigas: hablaban de proyectos que nacen y mueren, de personas que van y vienen, de ilusiones podadas y brotes de otras frescas, distintas. De mujeres orquesta que escalan problemas y cuidan flores, que son humanas y se quiebran, que son heroínas y hacen cima.  De viajes que buscan dunas y silencio, belleza y horizonte.  De cómo hacen para que el día se pare un rato sin que nada se pare. De cómo, decir adiós a tantas cosas, es un golpe de marea. De cómo con retales de vida inventan universos propios más allá del cielo. De no luchar ya contra los días, ni afanarse en conquistarlos: mejor surfear cada cosa que llega tras la estela de lo que traigan las nubes. Abandonarse a la incertidumbre. El único mar en calma es el que pinta la noche cuando nos quedamos a solas con ella.

(Fotografía de Ana Serrano Tierz)

Alquimia.

IMG_20171102_064621_535Alguien que me amó dijo de mí que tenía el superpoder de encontrar la única cosa bonita en medio de todo lo feo. Éramos jóvenes y creíamos que la felicidad nos vendría dada sin más, que esperaba a la vuelta de la esquina.

A veces, cuando paseo, me acuerdo de aquellas palabras. Las más bellas. Enciendo los ojos y les pregunto si todavía está ahí ese don, si la vida no lo habrá lesionado. Si todavía dibujo esquinas de alegría en el desierto. Si aún puedo jugar a alquimista con todo lo feo.